MIS DESEOS AL NUEVO AÑO

Como de desear se trata, trataré de desear al máximo.

A mi familia, la extensa, le deseo paz, tranquilidad, que siga fluyendo el amor y le agradezco que quieran así a mi Julia Bien.

A mis amigos, agradecer eso, su amistad incondicional y pedir al año para ellos lo que más deseen y lo que no pero que necesiten realmente. Salud, amor y ese estado de plenitud que da el ver que tu vida va según planeaste o imaginaste.

A mis amigos futuros padres adoptivos, quitarles el adjetivo de futuros y que disfruten en plenitud esta maravilla de ser padre y escuchar que te llaman mamá o papá.

A mi costado, a Fernando solo puedo desearle seguir viviendo la paternidad al 100 por cien, agradecer sería poco, su AMOR, BONDAD, PLENITUD ESPIRITUAL Y PERSONAL , ser como es y quien es y que además el nuevo año le traiga esa plaza definitiva que tanto merece y se esta forjando.

A mi madre, le agradezco ser madre y abuela, querer a mi Julia Bien como lo hace y pido para ella años de salud para poder ver, disfrutar y abrazar a mi futuro hijo-a que esta por venir.

Para mi me parece tanto pedir, este año me colmó sencillamente. De paz, serenidad , ternura, AMOR , cansancio del que engancha!!!, ¿qué más pedir?... Pues sí, ese segundo sueño que fue el primero, que me acerque a mi hijo-a de China, que parece que ha decidido comenzar a moverse otra vez más y de alguna forma acerca ese hilo rojo.

Para todos a los que no conozco y sufren, temen, padecen o desean que dejen de sufrir, temer o padecer, que amen, gocen y sigan deseando que es lo que alimenta el espíritu.

A mi hija, para ella si me atrevo a pedir, bien fuerte:

Nuevo año , nuevos aires, nueva fuerza y energía, llevaros sus miedos,
Llevaros sus pesadillas de noche y dejar paz en su alma.
Traerle un poco de oro en forma de mayor seguridad en si misma, en lo que vale y puede...
Traedle un poco de incienso en forma de fuerza renovada en sus defensas, aun bajas a consecuencia de la supervivencia que debió vivir sus primeros 6 meses sin nosotros.
Regaladle mirra, de esa que transforma en risas los temores, en seguridad la falta de firmeza, de carácter esas flaquezas y de confianza la desconfianza que aun vislumbro en sus ojos a veces.

La desconfianza en un mundo que le fue hostil y del que aún a veces no sabe que esperar.
Dejadle a los pies de nuestro árbol la seguridad en ella, que aparte un poco su mamitis, que a mamá no estorba pero a veces duele. Esa que no es siempre amor a mamá y es en bastantes ocasiones miedo.
Que sin dejar de recordar, sus recuerdos avivados a veces por una foto en Vietnam, no estremezcan su alma, aflojen su seguridad y se metan en sus sueños.
En definitiva, le pido al 2011 un poco más de “buena adaptación como hasta ahora” a su nueva vida, a su familia que la adora. No le puedo evitar su dolor, le acompaño en él, pero duele que le duela.

Para la familia biológica de mi hija, pido tranquilidad y me encantaría transmitirle seguridad, en que su hija esta donde debía estar y que sus padres la adoran, la cuidan y la quieren en nombre de ellos y nuestro también.

Para todos, que vuestros deseos se hagan realidad y mucha salud y amor.